El proyecto que presentamos hoy consiste en la remodelación total de un local comercial a pie de calle en Madrid; el proyecto de interiorismo y decoración de tienda de vinos Wine Store, cuyo diseño se basa en la representación de los elementos principales de una bodega. La tienda es la bodega, y los corchos, botellas, copas y cajas crean un paisaje relacionado con el mundo del vino.
Sacando partido a un local reducido y con poca luz
Las dimensiones del local, en concreto del ancho del espacio, eran mínimas y la luz muy escasa. Por ese motivo se decidió mantener el esquema organizativo del frente y modificar las condiciones lumínicas del interior para compensar la falta de luz natural. La propuesta consiste en simplificar los planos de materiales y jugar con las texturas que recuerdan a la naturaleza del vino.
Los seis planos que definen el espacio deben tender a simplificarse en las formas y adoptar un modelo común entre sí. Por ello, los planos laterales del espacio presentan una luz difusa en su longitud, que surge como protagonista de cada superficie. El plano frontal se utiliza para potenciar las dimensiones del espacio, utilizando un espejo que refleja la luz del exterior.
Los grandes protagonistas del espacio interior son una mesa central compuesta por cajas de vinos y una lámpara que la corona formada por copas.
La mesa central, constituida por cajas de botellas de vino macladas, mediante un sistema que permite la multiplicación infinita de los volúmenes. La estructura de las cajas permite que no sea necesaria la colocación de una estructura secundaria, aportando la rigidez y la resistencia necesaria para el uso para el que dicha mesa será destinada. Alrededor de la mesa estanterías que también son cajas de vino.
Una lámpara de copas para decoración de tienda de vinos
Como coronación de la mesa, en la superficie del techo surge una lámpara compuesta por copas de vino que recorren un conjunto de splines controladas geométricamente. El apoyo de las copas se realiza mediante guías de metacrilato, que soportan el peso de casi trescientas copas de vino. Dichas curvas generan unos recorridos sinuosos que ofrecen un resultado alabeado a la disposición final de todas las copas, y permitiendo que los rayos de luz de la lámpara incidan en las superficies de las copas y se reflejen en todas las direcciones.
El espacio queda rematado por materiales naturales y revestimientos que permiten generar superficies uniformes, en las que los principales protagonistas son la luz y el juego de la misma sobre cada una de las texturas. Por tanto, la intervención plantea una modificación mínima de la forma constructiva del espacio, y una remodelación de la apariencia mediante pequeñas alteraciones de las sensaciones lumínicas y formales.
Secuencia de elementos iguales en la decoración de tienda
Se ha aprovechado la organización existente del escaparate, interviniendo exclusivamente en el aspecto exterior, y jugando con el carácter infinito de una secuencia de elementos iguales; botellas a un lado de la puesta de acceso, corchos al otro. La intervención juega en cada elemento con la repetición de elementos simples mediante una mecánica esquemática, generando superficies polifórmicas, que reciben del exterior el reflejo y la incisión de la luz natural y artificial.
Interiorismo: Mecanismo.
Fotografia: Javier Bravo.