Iván Cotado diseña el interiorismo para restaurante Pracer, la taberna canalla que se ha hecho con el Premio Incitus que lo destacaba como la propuesta hostelera más innovadora del año en Galicia.
Con un marcado carácter musical de espíritu underground inspirado en los espacios industriales berlineses de los 90, el estudio de Ivan Cotado, especializado en diseño de hostelería, concibe una taberna casual para foodies melómanos que hará las delicias de un público para el que comer es mucho más que alimentarse.
Siempre hay contenido detrás de un buen Interiorismo Estratégico. Este proyecto es un altavoz que lo muestra y demuestra al mundo. Así es Pracer; emocionante y delicado, descarado y punzante.
Iván Cotado ha diseñado esta taberna que se hizo con el 2º Premio Incitus que lo destacaba como la propuesta hostelera más innovadora del año en Galicia. El galardón, entregado por los estrellados chefs Pepe Solla, Marcos Morán y Xoán Crujeiras, lo reconocía como una apuesta arriesgada, por una desacomplejada cocina de Km. 0 y una singular puesta en escena.
Cómo se proyectó el interiorismo para restaurante más canalla
La propuesta de valor de Pracer, cuyo nombre es toda una declaración de intenciones, es ofrecer una gran experiencia gastro-musical. Con unos objetivos estratégicos claros y precisos; poco personal y óptima capacidad.
El diseño parte de un local de superficie reducida y con una morfología trapezoidal irregular. En tan solo 70 metros cuadrados de planta más 25 de entreplanta se consiguen 40 plazas atendidas por 2 cocineros y 2+2 camareros. Una cocina-barra de 22 m2, tres almacenes que suman más de 14 m2, aseos, reservado, un escenario y una cabina para DJ.
Alma y Versatilidad se reflejan en el interiorismo para restaurante Pracer
Se dispone una barra central en U que subraya el espectáculo gastronómico primando la experiencia del cliente y facilita la atención directa por parte del cocinero, reduciendo así la necesidad de personal.
El reservado, convertible a escenario para monólogos y actuaciones musicales, la cabina del DJ sobre el hall de entrada, las mesas bajas y una minibarra lateral para esperas y picos de actividad desarrollan la versatilidad estratégica de un restaurante que puede ser tan grande o tan pequeño como el momento requiera.
Pero el verdadero alma de Pracer es la estimulación sensitiva. Música para los oídos, cocción para las fosas nasales, texturas para la yema de los dedos, decoración para la vista y sabores, muchos y punzantes sabores, para las papilas gustativas. Y todo esto representado en el Interiorismo Estratégico del estudio.
Música y gastronomía enlazadas por el interiorismo
La música y la gastronomía corren por las venas de Moncho Bargo y Javi Freijeiro, chefs y propietarios de Pracer, y el restaurante refleja sus personalidades. Presidido por un excelso grafiti realizado por el artista Sebla, con un gran pulpo y un jugoso cerdo, la ambientación musical cuenta con la icónica realidad de los escenarios que tanto gustan frecuentar.
Truss de los que cuelga la iluminación teatral que ambienta la barra central, platos de batería que iluminan las mesas bajas y una adusta paleta de materiales inspirada en el espíritu underground de los espacios industriales berlineses post caída del muro.
Flight cases, cajas de instrumentos musicales, conforman el almacenaje de primera mano y la barra, que también apoya en las estructuras tubulares utilizadas en montajes de escenarios. Estas representativas cajas junto al backline de la entreplanta, además, realizan una función fundamental. Dibujan la experiencia mientras integran de forma sutil los difíciles recortes perimetrales del local y el pilar central, reconvertido ahora en estantería y separación funcional.
Valla de simple torsión, hormigón pulido, ladrillo cara vista y chapa pegaso son los revestimientos que acaban de conformar el espíritu canalla de Pracer. Una taberna casual que hará las delicias de un público melómano.
¡Larga vida a Pracer!
Interiorismo: Ivan Cotado diseño de interiores
Fotografía: Ivan Casal Nieto